Una ciudad progresa en la medida que progresan sus habitantes. Por eso, si alguna cosa tengo clara es que el principal patrimonio de esta ciudad son las personas que viven en ella, que se comprometen día a día, que suman ideas, que se implican y trabajan para trazar un camino de progreso y bienestar. Evidentemente, para llegar a ese punto es imprescindible contar con los recursos y los servicios adecuados y nosotros, en eso, hemos sido y somos muy rigurosos y realistas.
Los presupuestos de 2016 van en esa dirección: con crecimientos del 17% en cultura o del 10% en educación y deporte. Porque queremos una ciudad humana, preparada y formada. Y por ello es prioritario para nosotros el acceso al conocimiento desde una perspectiva amplia, no sólo con la formación reglada; sino a través del impulso de proyectos transversales como el “Educar per Créixer”, con la red de bibliotecas municipales como ejes de divulgación, con los dos nuevos espacios de lectura que crearemos este año en Almeda y Fontsanta, con espacios de conocimiento tecnológico como el Citilab, con centros y equipamientos de formación para todas las edades y en disciplinas diversas. Y todo ello, además, manteniendo equipamientos de los cuales las administración autonómica se ha desentendido como las escuelas bressol, la escuela de música y que nosotros hemos mantenido con nuestros recursos. Creando además nuevos espacios para las familias, para los jóvenes o las personas mayores que permitan ampliar la formación y el conocimiento.
Seguiremos también sumando en cultura con el aumento de actividades y propuestas teatrales o musicales y vinculadas al arte, a la creatividad y a la innovación. El deporte será también un eje importante de desarrollo personal y colectivo en el marco de unas instalaciones que cubran un amplio espectro de necesidades y cuya principal línea de desarrollo pasará por entender el deporte desde una perspectiva formativa en valores y de crecimiento, más que desde el marco puramente competitivo.
Una ciudad inteligente y con futuro es aquella que vincula su capital humano al conocimiento, a la igualdad de oportunidades, a la innovación y al desarrollo social. Ese es nuestro objetivo prioritario, una gran ambición por la que trabajamos día a día con recursos, con proyectos concretos y con la convicción de que el mejor patrimonio que podemos dejar a las generaciones venideras es la cultura y el conocimiento.