Citilab-Cornellà ha obtenido un nuevo reconocimiento a su labor de investigación y fomento de la sociedad del conocimiento en todos los ámbitos sociales. El martes pasado recibí en Madrid, de manos de la infanta Cristina, el Premio IMSERSO a la calidad y buenas prácticas, concedido al proyecto SeniorLab.
Este proyecto ha sido muy interesante porque se fundamenta en la hipótesis que la gente mayor sin conocimientos de tecnologia son perfectamente capaces de aprender a utilizarla, e incluso de innovar. La teoría se ha demostrado en sus dos años de funcionamiento, y es más conlleva numerosos mejoras en su autoestima, calidad de vida y transformación de hábitos.
Más allá de este premio, para la ciudad de Cornellà, el Citilab es una apuesta clave: el Ayuntamiento lo impulsó como laboratorio ciudadano de innovación social y digital, y gracias al apoyo de todas las instituciones y empresas que forman parte de la Fundación, se ha convertido en una referencia a nivel europeo. Los modelos abiertos de investigación, desarrollo e innovación que promueve el Citilab son fundamentales en la nueva cultura tecnológica, y tenemos que seguir este camino que con orgullo puedo decir que el Citilab abrió.