Hasta dentro de unos setenta años aproximadamente no será efectiva la igualdad salarial entre mujeres y hombres según los expertos. Una desigualdad que también se produce en otros ámbitos y que pone de manifiesto que, a pesar de los avances, queda mucho por hacer para remover los patrones socioculturales que continúan discriminando a las mujeres y que generan desigualdad y violencia de género.
Es una cuestión de corresponsabilidad tanto de los poderes públicos, como de la sociedad en general. Y es también un tema de educación en el seno de las familias y en las escuelas.
En Cornellà llevamos muchos años trabajando por la igualdad entre hombres y mujeres, con políticas activas y transversales, con diálogos abiertos con las agrupaciones de mujeres y agentes sociales y con planes especiales que nos permiten hacer hincapié en este ámbito. Fruto de este trabajo hemos aprobado en el pleno municipal de octubre el III Plan Transversal de Políticas de Igualdad. Es el tercero en quince años y es un nuevo compromiso de este equipo de gobierno para poner en marcha nuevas medidas acordes con las necesidades actuales.
Este Plan tiene tres ejes de actuación prioritarios: favorecer unas adecuadas condiciones de igualdad en todos los terrenos, trabajar por la erradicación de la violencia de género y compromiso del gobierno municipal con la igualdad efectiva en todos los ámbitos sociales. Para llevarlos a cabo se han concretado alrededor de 60 medidas que pondremos en marcha entre 2016 y 2020.
Pero además, debemos ser plenamente conscientes que para la equiparación efectiva y real de derechos entre mujeres y hombres hace falta, además de la contundencia de los poderes públicos, que se modifiquen actitudes y conductas que quedan fuera de la regulación legal. Es ahí donde la educación juega un papel fundamental y es ahí donde se podrán establecer unos pilares sólidos para poder garantizar en el futuro la plena igualdad.