La ONU declaró oficialmente el 8 de marzo Día Internacional de la Mujer, una fecha en la que se pone de manifiesto la reivindicación de la igualdad completa de derechos de las mujeres en todos los ámbitos sociales. Y estamos en 2017 y todavía hay poco que conmemorar y mucho por reclamar: la igualdad salarial, la erradicación de las violencias de género o la discriminación, entre otros muchos aspectos.
Parece mentira que en pleno siglo XXI se sigan reivindicando derechos de principios del siglo XX y que aún se oigan voces malsonantes que no entienden esa igualdad. Hay mucho camino por hacer y un largo recorrido cultural y social para que las dinámicas cambien. En Cornellà siempre hemos estado sensibilizados con este tema y hemos impulsado políticas e iniciativas para avanzar: creando hace más de veinte años un primer plan de igualdad, que recientemente hemos actualizado para dar paso a un III Plan Transversal de Igualdad para el periodo 2016-2020. Porque es importante trabajar desde una perspectiva amplia, integral y transversal. Tenemos en el horizonte proyectos para humanizar la ciudad, y feminizarla es un uno de ellos. Debemos seguir comprometidos con ello, inculcar el respeto y la igualdad desde la educación en edades tempranas, impulsar políticas que favorezcan esa igualdad real y fomentar y practicar con el ejemplo.
Durante todo el mes de marzo tenemos muchas
actividades reivindicativas para dar visibilidad y empoderar el papel de las mujeres y, este año, el Consell de la Dona hará un reconocimiento público a entidades que trabajan en su día a día en ese camino hacia la igualdad. En este caso los reconocimientos son para la Xarxa de Dones Emprenedores y para el claustro de la escuela Antoni Gaudí. El miércoles tendremos el acto principal, pero la igualdad se construye día a día, con actitudes, con leyes, con medidas y con compromiso.
